No, Capital, la opinión no importa

Regina Limo
Nerd feminista y lesbiana. Escribo guiones, narrativa y teatro. Leo como descosida y colecciono juguetes. También puedes leerme aquí Hueveo en Twitter como @reinadecapitadaAyer por la tarde, en el espacio de Capital que conducen Yvonne García y Enrique Montenegro, esta fue la pregunta planteada para discusión: ¿Crees que las mujeres incentivan el acoso callejero por su forma de vestir? Aquí el tuit.

Casual. Como quien pregunta si Messi debió irse o quedarse. Imagen: captura Twitter
Por supuesto, en el Twitter reaccionaron con el hashtag #PreguntaDeRadioCapital
#PreguntaDeRadioCapital ¿Crees que los cholos incentivan el racismo por ser muy marrones? https://t.co/mh6oviRYKW
— Sandra Rodríguez (@LaSandunga7) 27 de junio de 2016
Creo q radio Capital está haciendo un verdadero esfuerzo en quedar como el medio de comunicación más misógino q hay https://t.co/h2hF50FVoB
— Melissa (@LaMeliEscribe) 27 de junio de 2016
#PreguntaDeRadioCapital ¿si una mujer es golpeada por su pareja,es porque ella se lo buscó?
— Diana Gamboa (@bunkdi) 28 de junio de 2016
Solamente el planteamiento de la pregunta es tan desatinado que se presta a la relativización de un problema que el Estado ha asumido como tal, pues la legislación ya lo contempla y diversas municipalidades están tomando medidas para frenarlo. Qué tanto alcance real tengan esas medidas ya es materia de otra discusión, pero hay cierto consenso en que el acoso solamente es culpa de quien acosa, de la misma forma en que el robo solo es culpa del ladrón.
Pero el asunto va mucho más allá del acoso. Hay un problema muy serio en cómo se están planteando los temas en Radio Capital últimamente. Cuestiones básicas de derechos fundamentales son sometidas a la opinión de cualquier oyente.
Parece que Capital no está distinguiendo entre los temas opinables y aquellos en los que el medio debería tener una posición clara sobre el tema, diga lo que diga el oyente. La responsabilidad social de los medios de comunicación no consiste solamente en hacer ciertas actividades culturales, sino además en difundir ciertas ideas clave para la la ciudadanía.
Se confunde la validez del derecho a opinar con la validez de las opiniones. Lo primero es vital para la convivencia, lo segundo es una falacia. Ya lo ha dicho antes Fernando Savater, las opiniones deben ser materia de escrutinio público, por lo tanto no pueden ser respetables. Acá Miguel Flores-Montúfar se explaya más al respecto.
Pero el problema no consiste solamente en poner la polémica por encima de la responsabilidad, sino el tipo de temas que la radio está usando para esto. No están polemizando sobre el mejor jugador de la Copa América o sobre quién debería ser el primer ministro de Pedro Pablo Kuczynski, temas sobre los que puede haber también múltiples ideas erradas en boca de quienes no se especializan en fútbol o política, pero que no refuerzan falsos sentidos comunes. Las polémicas en Radio Capital insisten en relativizar la violencia de género poniendo su gravedad a
debatir en línea abierta.
¿Qué harías si tu esposa es “rica y apretadita”?¿le pedirías que se vista de forma recatada? @Phill_Butters pic.twitter.com/NkWF7AvELZ
— Capital (@Capital967) 28 de abril de 2016
No es la primera vez que se hace una pregunta de este tipo, antes, por ejemplo: «¿Qué harías si tu esposa es “rica y apretadita”? ¿Le pedirías que se vista de forma recatada?» , y en otra ocasión hablaron de «cuánto hay que invertir para llevar a una mujer a la cama», con Tomás Angulo. Pero el problema ya no es solo Butters. Capital parece tener poco tino sobre la violencia de género. Hemos llegado a ocupar el segundo lugar en feminicidios en América Latina, y en cuanto a violaciones no andamos mejor: somos los primeros. Con estas cifras, las agresiones sexuales no son temas opinables.
Amigos de Radio Capital, hacer pasar la opinión por sentido común no sólo es falaz sino peligroso. ¿Cuántas trabas hay en el camino para denunciar la violencia de género o las agresiones sexuales? ¿Cómo se puede enfrentar el machismo de la policía, de los médicos legistas, de los abogados si los medios de comunicación insisten en reforzar sus prejuicios? ¿Cómo enseñamos a combatir el acoso, la violencia de género, el feminicidio si le seguimos diciendo a la gente que no tiene nada de malo opinar y difundir que la culpa la tiene la víctima?
Más procrastinación
